Aquí están algunos beneficios adicionales de nuestros estudios en línea.

  • Misioneros pueden estudiar sin salir del campo misionero. No hay necesidad de esperar hasta que el misionero regrese a su país de envío, o a otro país, para estudiar. Hay que ejercer cuidado si vive en un contexto que monitorea y restringe actividad evangélica en línea, pero aun allá el uso de salvaguardas apropiadas (como redes virtuales privadas o vías encriptadas) muchas veces permite su participación en línea.
  • Misioneros pueden estudiar con sus iglesias enviadoras. Con un poquito de planificación, el misionero puede ser compañero de clase con individuos claves en sus iglesias enviadoras. Esto ayuda a formar vínculos sanos con estas iglesias. También ayuda a establecer una base común para la obra misionera.
  • Participantes tienen mayor acceso a cursos. Un participante puede estudiar un curso en línea aun cuando este curso no se ofrece en ningún grupo de estudio de su localidad.
  • Es más fácil lograr la cantidad mínima de participantes para un curso. Los participantes en línea provienen de un contexto muy amplio. Así, muchas veces es más fácil lograr la cantidad mínima de estudiantes requerida por un curso.

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